Cualquier conductor preocupado por la seguridad vial y su propia integridad se preguntará cuándo se deben cambiar los frenos. El desgaste del sistema de frenos alarga la distancia de frenado. Y eso puede provocar accidentes. Es esencial permanecer atento a las señales para el cambio de frenos.
Pero, ¿cuáles son estas? ¿En qué debes fijarte para conocer cuándo cambiar los frenos?
Vamos a ver la respuesta siempre teniendo en cuenta que este se compone de distintos elementos. Y su vida útil o nivel de desgaste puede ser diferente.
¿Cuáles son las señales para el cambio de frenos?
- Cuando se haya cumplido el kilometraje o tiempo de vida útil que señala al instalarlos.
- Si al conducir notas que el funcionamiento de los frenos ha cambiado.
- Al percibir la sensación de pedal de freno esponjoso.
- En caso de escuchar ruidos metálicos y vibraciones que te hagan sospechar del desgaste de los discos de freno.
- Cuando el «chivato» del salpicadero enciende un testigo o emite señales para el cambio de frenos.
- Siempre que detectes que las distancias de frenado son más largas.
- En caso de notar el freno muy duro.
- Cuando al controlar el desgaste percibes que es necesaria la sustitución de los discos, pastillas o zapatas.
No hay que olvidar que los elementos del sistema de frenos que sufren desgaste o tienen una vida útil limitada son dos: los discos y las pastillas de freno. Y no siempre tendrás que sustituir ambos. Pero que también el líquido de freno influye y se debe controlar.
¿Cuáles son los elementos que muestran señales para el cambio de frenos?
- Discos de freno o frenos de tambor.
- Pastillas o zapatas.
- Líquido de frenos.
En caso de percibir señales para el cambio de frenos estas pueden indicar la sustitución de alguno de estos tres elementos.
Los discos raramente se desgastan si antes no se han desgastado las pastillas. Por eso hay que controlar el desgaste de estas. Y sustituirlas a tiempo para aprovechar al máximo la vida útil de los discos de freno.
En cuanto al líquido de frenos este se debe cambiar cada dos o tres años. Depende del tipo de conducción y la calidad del líquido. Puedes comprobar el color periódicamente: si está muy oscuro ha llegado el momento de sustituir el líquido de frenos.
¿Cuándo cambiar las pastillas de freno y los discos?
Al margen de las señales para el cambio de frenos, la vida útil de las pastillas de freno y de los discos se mide en kilometraje recorrido. Pero este no es igual en unos elementos que en otros.
Generalmente, por cada vez que debas cambiar los discos de freno tendrás que cambiar las pastillas dos veces.
Además, debes tener en cuenta que el desgaste depende en gran medida de las condiciones de la conducción. En ciudad y en carreteras secundarias se hace un mayor uso de los frenos que en recorridos largos en autovía o autopista.
También el estilo de conducción influye. Si conduces con brusquedad, las señales para el cambio de frenos aparecerán antes que si lo haces suavemente.
¿Cuándo cambiar las pastillas de freno?
- Las pastillas delanteras cada 60.000 Km.
- Las pastillas traseras cada 120.000 Km.
Siempre teniendo en cuenta que son cifras orientativas. Y que, como decimos, según el tipo de conducción y las vías por las que se circula puede darse mucho antes.
Por eso siempre recomendamos estar atento a las señales para el cambio de frenos además de controlar el kilometraje realizado con cada juego de pastillas.
¿Cuándo cambiar los discos de freno?
- Los delanteros cada 120.000 Km.
- Los traseros cada 240.000 Km.
De nuevo teniendo en cuenta que son kilometrajes orientativos.
Aunque aún hay frenos de tambor la mayor parte de coches en la actualidad dispone de frenos en forma de disco. Estos permiten ver el desgaste y ver cuándo cambiar los discos es necesario.
Si percibes señales para el cambio de frenos o has cumplido el kilometraje que marca la recomendación de sustituir algún elemento del sistema de frenos, no lo dejes pasar. Te recomendamos acudir al taller cuanto antes para comprobar su estado y realizar las tareas pertinentes.
Recuerda que no sustituir elementos a tiempo supone un riesgo para ti y para la seguridad vial. Y puede provocar otros daños en el coche más costosos.
Si dudas cuándo se deben cambiar los frenos también podemos revisarlo por ti.
